La chica peculiar de los pelos rojos no tiene ganas de hablar...
La chica rara de los pelos rojos sólo tiene ganas de que la abracen...
La chica extraña de los pelos rojos sólo quiere que la entiendan...
La chica curiosa de los pelos rojos sólo quiere que la escuchen.
Pero ella sabe que jamás pasará...
La chica rara de los pelos rojos sólo tiene ganas de que la abracen...
La chica extraña de los pelos rojos sólo quiere que la entiendan...
La chica curiosa de los pelos rojos sólo quiere que la escuchen.
Pero ella sabe que jamás pasará...
Ella sabe que sus pensamientos van más allá del bien y del mal...
Que esta mierda de sociedad no entiende su ideal de amar...ni el de querer...ni el de comprender.
Que ella calla...se pelea consigo misma pero se calla...
Se mira al espejo y se asquea.
No es una princesa y nunca lo será.
Ya se puede cepillar el cabello rojo cien veces antes de dormir o antes de salir de fiesta.
"Que más da, niñata estúpida??
Crees que a alguien le importa??
Se ríen más con tu desdicha que con tu felicidad....
Selecciona muchacha...selecciona...."
Ella quizás es algo bruja....pero una bruja "buena"
Tan sólo es la antagonista provocativa de este cuento infinito y absurdamennte continuo.
Ella jamás desea mal a los que aprecia...prefiere su bienestar al suyo propio.
Y se hace daño...daño a ella misma.
Porque sabe que debería decir basta.
Mandarlo todo a la mierda.
Pero no puede.
Pues ella y su adorada luna blanca comparten un secreto.
Un secreto muy bien guardado...un secreto jamás contado.
Un secreto que en silencio en medio de la noche sólo susurra la frase:
"espera...espera tu momento..."
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